Más allá del miedo superficial

El cine de terror, a menudo considerado como género destinado simplemente a provocar miedo, en realidad sirve como plataforma artística y cultura que va más allá de las reacciones superficiales de la audiencia. El terror se puede ver funcionalmente como entretenimiento pero es más que eso, actúa como un medio para explorar temáticas sociales profundas, desafiar las convenciones cinematográficas y proporcionar un espacio para la reflexión emocional. 

Temas como la exploración de miedos sociales por medio de la visualización de ansiedad colectiva y pánico es muy funcional en películas con amplitud estilística marcada aunque no necesariamente hay que ser tan gráficos en este ámbito, películas como “Get Out” de Jordan peele ilustran cómo el género puede ser utilizado para examinar cuestiones sociales críticas como lo es la discriminación racial sin la necesidad de ver escenas explícitamente violentas. 

Por medio de películas como “the babadook” de Jennifer Kent, se demuestra la dedicación del terror como una metáfora de catarsis emocional con la ayuda de lo sobrenatural. Está película en específico representa alegóricamente el dolor y el luto. Cuestiones como la innovación técnica y creativa, no muy relacionado con el cine, se puede observar (simplificada en mi opinión) en “the Blair Wicth project” que destaca como un género diferente donde contar historias, por ejemplo a través de cine encontrado, desafiando las convenciones cinematográficas comúnmente establecidas, pero al igual que se hace con la exploración de los miedos sociales, la catarsis emocional y la creatividad, podemos evidenciar el desafío a las convenciones narrativas y el ejemplo principal para esto es “the exorcist”, ya que lleva el terror a las nuevas alturas, desafinado las expectativas del público. 

Un factor principal como las películas específicas del género, es la reflexión sobre la condición humana ya que puede ser una herramienta poderosa para abordar temas existenciales, “a quiet place” es un ejemplo para mi, ya que utiliza premisas del terror para reflexionar sobre la comunicación, el sacrificio y las dinámicas familiares en un mundo postapocaliptico. 

¿Coclusión? El cine de terror es un medio infravalorado donde se puede explorar, cuestionar y reflexionar sobre cuestiones sociales y emociones profundas. A través de capacidad para desafiar convenciones y ofrecer experiencias más allá del mero susto, el cine de terror desmuestra su importancia cultural y artística.